Alberto López Morales
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| De 3 lavadoras, dos están descompuestas |
JUCHITÁN, Oax.- Los
técnicos radiólogos María Teresa Sales y Jaime Pérez expresan vehementes su
deseo de atender con calidad a los pacientes del hospital “Macedonio Benítez
Fuentes”, pero el equipo de mastografía para la detección del cáncer de mama
está descompuesto y el de rayos X funciona a medias y lo que es peor para la
salud de ellos, ni siquiera cuentan con el equipo de protección para trabajar en
la sala de radiología.
El revelador del
mastógrafo está fuera de servicio desde hace dos años y el de rayos X funciona
a medias desde hace cuatro meses. María Teresa y Jaime secan las películas de
rayos X con el calor que irradian las lámparas de mesa. No pueden hacer más
porque en casi todas las áreas del hospital hay carencias y limitaciones.
Incluso se ven obligados a usar un mayor porcentaje de radiaciones en cada
paciente para que el estudio sea certero. Así sustituyen las deficiencias del
equipo de rayos X.
Al lado de la
sala de rayos X y mastografía del hospital, se ubica un pequeño salón con
letrero arriba de la puerta que dice: Tomografía. Adentro, en penumbras se
observa un tomógrafo, nuevo, envuelto en su plástico protector. Lleva un año
arrumbado en la sala. “No funciona. No se ha podido instalar porque la
Secretaría de Salud no ha pagado la póliza para que vengan los técnicos del
proveedor Siemens para que instale los programas. Mientras tanto, la población
paga los servicios de tomografía que se realizan en clínicas privadas”, comentó
el médico Juan Orozco, delegado sindical del nosocomio que se ubica al oriente
de la ciudad, sobre la avenida Efraín R Gómez, la calzada que conduce al
panteón “Domingo de Ramos” y que en estos días de lluvia se convierte en una
laguna de pestilentes aguas.
La lavandería del
hospital también tiene carencias. De las tres lavadoras que hay, dos están
descompuestas desde hace dos años. No hay dinero para repararlas. Solo funciona
una que lava un promedio de 200 kilos por cada uno de los tres turnos de ocho
horas. “La estamos castigando y no sabemos qué va a pasar si se descompone”,
dijo el delegado sindical Juan Orozco, frente a montones de sábanas de color
verde pálido de tanto uso.
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| Un autoclave, descompuesto, el grande chorrea agua |
En el quirófano
del hospital hay dos máquinas llamadas “autoclaves” que sirven para esterilizar
las batas e instrumental de los médicos. Una está fuera de combate desde hace
más de un año. La otra, la más grande, chorrea agua. “Nuestro deseo es atender
a los pacientes con calidad y calidez, pero con tantas carencias, no se puede”,
expresó con molestia la radióloga, María Teresa Sales.
Todas las
carencias que vive el hospital “Macedonio Benítez Fuentes”, están contempladas
como necesidades apremiantes desde el pliego petitorio que presentó la sección
35 del sindicato de los trabajadores de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO),
en junio de 2013. En ese entonces eran 157 necesidades. Ahora, en 2014, se
sumaron otras 303 necesidades que esperan respuestas.
“Parece que lo
que menos les interesa a las autoridades es la salud del pueblo oaxaqueño”,
dijo el secretario general de la subsección dos del Istmo, Rodolfo Martínez
Altamirano, quien anunció que continuará el paro laboral en las 142 unidades
médicas de los SSO establecidos en el
Istmo. El paro comenzó hace 15 días y desde el pasado nueve de junio se
generalizó y solo hay servicios en las áreas de urgencia.
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| Tomógrafo nuevo, sin instalar |
Los trabajadores
de Salud, dijo “desde hace varios años hemos sustituido nuestras peticiones de
mejoras salariales y prestaciones laborales, por peticiones de mejoría de
servicios de salud con infraestructura, recursos humanos, material y equipo
para otorgar más y mejores servicios a nuestra población usuaria”.
Para este lunes y
martes, el paro laboral continuará. Los representantes sindicales se reunirán
este martes con las autoridades. El pasado jueves se rompió el diálogo. “No
podemos permitir que los servicios de salud a los pacientes se deteriore por
culpa de las autoridades. Tenemos muchas necesidades”, señaló el secretario de
Organización de la subsección 02 del Istmo, el médico Ricardo Nagaya Escobar.
Entre esas
necesidades se encuentra la contratación de personal para cinco unidades
médicas de nueva creación. Cuatro de ellas se ubican en la jurisdicción de San
Juan Guichicovi, un poblado de indígenas mixes y la quinta en esta ciudad
zapoteca. Hay otras necesidades, como la terminación de los hospitales de
Santiago Astata, Magdalena Tequisitlán y de San Mateo del Mar, que están en
obra negra.
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