Alberto López Morales
JUCHITÁN, Oax.- “¿Para
qué arriesgamos a la gente? De todas formas la elección en Belisario Domínguez,
Chiapas no tendrá ninguna validez porque está en el territorio Chimalapa”, razonó
la coordinadora de los pueblos zoques de la zona oriente, María García.
Los zoques
mostraron prudencia y evitaron así la confrontación, sin embargo, no instalaron
la casilla 1340 en la congregación de Benito Juárez, en la zona oriente de los
chimalapas. “Se cumplió el acuerdo de la asamblea”.
Durante varios
días previos a la jornada comicial, los zoques de San Antonio y Benito Juárez
habían advertido que impedirían de cualquier modo la celebración de las
elecciones municipales para elegir al primer presidente municipal de Belisario
Domínguez, creado apenas en este año.
“No fuimos a
impedir la votación en Belisario Domínguez porque sería arriesgado, sería ir a
un enfrentamiento con los más de 200 policías que mandó el gobierno de Chiapas
y acá en la montaña estamos solos, sin apoyo del gobierno de Oaxaca”, resaltó.
En la asamblea
comunal celebrada el sábado en San Antonio, pobladores de esa localidad que
pertenece a San Miguel Chimalapa y de Benito Juárez habían acordado además
bloquearle el paso a los habitantes del ejido chiapaneco Gustavo Díaz Ordaz,
para que no acudieran a votar.
Sin embargo, los
chimalapas tampoco cerraron el camino en San Antonio y desde muy temprano pasaron más de 10
camionetas que llevaban a los pobladores de Díaz Ordaz a elegir al primer
presidente de Belisario Domínguez, conocido por los chimalapas como Rodulfo
Figueroa.
En Belisario
Domínguez, Chiapas, unos 10 kilómetros al sur de San Antonio, Chimalapas,
frente a la avanzada construcción de lo que será el palacio municipal, una
larga fila de votantes esperaba su turno para votar.
Los chiapanecos
de los ejidos Gustavo Díaz Ordaz, Flor de Chiapas y Ramón Escobar Balboa
acudieron a elegir al primer presidente municipal de Belisario Domínguez de
entre Oel León Reyes (PRI), Roberto del Pino (PVEM), José Luis Torres (PRD, PT
y MC) e Iber Clemente (PAN).
La votación
comenzó bajo la estrecha vigilancia de los policías estatales de Chiapas que
llegaron a Belisario Domínguez desde el pasado domingo y cuya presencia, que
significó para los Chimalapas la violación del acuerdo de distensión, disuadió
a los zoques.
Frente a la
copiosa votación de los chiapanecos, en San Antonio se impuso el silencio. Los
zoques guardaron para otra ocasión la cadena con la que durante 55 días a
partir del 20 de octubre del año pasado cerraron el paso a los chiapanecos de
Gustavo Díaz Ordaz.
En la comunidad
zoque de Benito Juárez, unos 20 kilómetros al norte de San Antonio, la
papelería electoral quedó bajo resguardo. Los chimalapas cumplieron el acuerdo
de no instalar la casilla como una forma de protesta silenciosa ante la falta
de apoyos del gobierno de Oaxaca.
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